Mostrando postagens com marcador pensamentos. Mostrar todas as postagens
Mostrando postagens com marcador pensamentos. Mostrar todas as postagens

11 de fev. de 2015

Pensamentos curam mais que medicamentos


"Cuando piensas, transmites energía, y los pensamientos son más poderosos que la química. Así que esto es peor para las empresas farmacéuticas porque no lo pueden vender. Por tanto, no les interesa una conexión entre la mente y el cuerpo."

Los pensamientos curan más que los medicamentos

Bruce Lipton



Reclama una nueva medicina, la que tenga en cuenta la capacidad de curar de la energía, mucho más eficaz que los medicamentos. Bruce Lipton (Estados Unidos, 1944) ha conseguido aunar ciencia y espíritu. No es poco mérito el suyo si tenemos en cuenta lo "alérgicos" que son los científicos a los temas trascendentales. Es doctor en Biología Celular y fue pionero en la investigación con células madre. Sus estudios sobre la membrana celular y las modificaciones de las células según el entorno sentaron las bases de la nueva epigenética. Sus descubrimientos (que iban en contra de la opinión científica establecida de que la vida es controlada por los genes) y el estudio de la física cuántica le han llevado a criticar duramente la medicina convencional. Es autor de libros como La biología de la creencia y La biología de la transformación.

Usted asegura que la medicina convencional va por muy mal camino. ¿Tan peligrosos son los medicamentos que nos recetan?
Nos dan medicamentos para la enfermedad, pero esto causa muchos problemas en el cuerpo. Porque esta medicina basada en la farmacología no entiende cómo está interrelacionada toda la bioquímica del organismo. Cuando tomo una pastilla química y la introduzco en mi cuerpo, no solo afecta a aquel lugar donde tengo el problema, sino que afecta a muchas otras cosas a la vez. Son los llamados “efectos secundarios”. Pero, en realidad, no son secundarios sino directos. No entienden que el efecto de las drogas no solo crea un efecto sino múltiples. Según las estadísticas en EEUU, ¡los fármacos matan allí a más de 300.000 personas cada año! Y esas personas son muchas más que las que mueren por tomar drogas ilegales. Hay algo que no funciona en la ciencia médica. Hace algunas cosas bien, como la traumatología, pero está matando a mucha más gente de la que ayuda. Tiene que aprender cómo funcionan las células.


¿Y qué ha descubierto sobre las células pero que no tiene en cuenta la medicina? 
Yo ya trabajaba con ellas en los años 60. Fui un pionero porque en esa época había muy poca gente trabajando en ello. Y un experimento que hice en esa época cambió la idea que tenía del mundo. Puse una célula madre en un plato petri y, como cada diez horas se divide en dos, al cabo de dos semanas, tenía miles de células, todas idénticas. Luego cogí algunas de ellas, las coloqué en otro plato y cambié el entorno celular (son más como peces porque viven en un entorno fluido). Cambié la química en ese plato y ahí formaron músculo. Después, cogí otras del primer plato y las puse en un entorno diferente, y se formó hueso, y otras se convirtieron en grasa al volver a cambiar el entorno. Entonces, la pregunta es muy sencilla, ¿qué controla el destino de las células? Todas eran idénticas, lo único que era diferente era el entorno. Cuando cojo células sanas y las coloco en un entorno nocivo, la células enferman y mueren. Si un médico las mirara, diría: “¿Qué medicina hay que darles?” ¡Pero no hace falta ninguna medicina! Les cambias el entorno nocivo, las colocas en uno sano y saludable y las células sanan. Los humanos somos una comunidad de 50 trillones de células, por tanto, la célula es el ser viviente y la persona es una comunidad. ¡El humano es un plato petri cubierto de piel!

La industria farmacéutica no quiere que sanes sin comprar sus fármacos. ¿Se puede poner energía en una cápsula?
 ¿Cuál es el entorno de la célula que hay que cuidar?
Dentro de mí hay 50 trillones de células y el entorno celular para nosotros es la sangre, por ello la composición de la sangre cambia el destino de la célula. ¿Y qué controla la sangre? Pues el sistema nervioso, que crea una química diferente según el sistema exterior. La célula y el ser humano son la misma cosa. Por ello, si pongo al ser humano en un entorno nocivo, igual que la célula, también enferma. Si lo trasladas a un entorno sano, entonces sana. Por tanto, la medicina culpa a las células por la enfermedad y trata de cambiar la química de las células, pero ese no es el problema, el problema es el entorno. Y si cambias a la persona de entorno, sin medicamentos, el cerebro cambia la química. El cerebro de la célula y el de la persona leen y entienden el entorno.

En un entorno sano, ¿nos curamos automáticamente? ¿Así de fácil?
No es tan fácil, porque la mente interpreta. Puede suceder que estemos en un entorno muy sano y que la mente lo lea como un entorno negativo o perjudicial. Entonces crea una química que hará a mi cuerpo enfermar. La diferencia entre la célula y el ser humano es que este tiene una mente que hace una interpretación y la célula lee el entorno directamente. Si metes un programa con errores en la mente, entonces la química que genera no está en armonía con la vida. Y esto nos sirve para entender cómo funciona un placebo. Cambio mi creencia y pienso que esto me va a sanar, tomo una píldora porque creo que esto me va a traer salud, y me mejora y me sana, pero la píldora podría ser de azúcar, en realidad no ha hecho nada, han sido mis creencias. Y a eso lo llamamos pensamientos positivos y efecto placebo.

¿Está diciendo que el efecto placebo –creer que algo nos sanará– es más curativo que un medicamento? Pero no hay casi investigaciones sobre eso.
Sí, tienes razón. ¿Eres consciente de que hay más de una manera de hacer energía sin tener que depender del petróleo? Pero seguimos dependiendo del petróleo porque no interesa el cambio a los que controlan la energía. Lo mismo pasa con las empresas farmacéuticas. Venden fármacos y ¿poder sanar sin fármacos es bueno o malo para la industria farmacéutica? No quieren que sanes sin comprar sus fármacos. ¿Se puede poner energía en una cápsula? Si fuera así, las farmacéuticas intentarían vendértela. Si puedo sanar sin usar medicamentos, la industria que los produce no gana dinero. Deberíamos poder decir que la ciencia está separada de la industria farmacéutica, pero no es así, porque con el dinero de esta se paga el desarrollo de la ciencia, y ese dinero solo va esos estudios que dicen que las drogas funcionan. El dinero controla la ciencia.



















Explíquenos cómo funciona ese poder que dice que tiene la mente para la autocuración.
He hablado de que la mente controla: si piensa de una manera, se va en una dirección y, si piensa de otra, se va en otra. Por ejemplo, cierro los ojos, los abro y veo a alguien a quien amo. Entonces mi cerebro segrega dopamina, oxitocina, etc. Lo puedo sentir en mi cuerpo, puedo sentir el amor, y esa química trae salud a las células. Por eso, quien se enamora se siente tan bien. Pero si abro los ojos y veo algo que me asusta, segrego hormonas del estrés. Y estas hacen dos cosas. La primera es que frenan el crecimiento del cuerpo. Porque si me está persiguiendo un león, necesito toda la energía para poder escaparme, y mi organismo apaga todo lo que no sea imprescindible para correr más rápido, así que se paraliza todo lo que tiene que ver con el crecimiento. La gente no lo sabe, pero tienes que crecer todos los días, porque, si no, te mueres. Cada día cientos de billones de células mueren y tienes que ir produciendo nuevas. Cada tres días, el sistema digestivo renueva sus células, pero si se intefiere con ese crecimiento, entonces no puedo estar sano porque estoy perdiendo demasiadas células al día, por eso la quimioterapia hace que se caiga el pelo y crea problemas de digestión, porque mata todas las células, no solo las del cáncer. La segunda consecuencia de las hormonas del estrés es que se cierra todo aquello que usa energía, y el sistema inmunitario usa muchísima energía: cuando estás enfermo, te sientes muy cansado porque tu energía la está usando el sistema inmunitario.

Eso significa que el estrés nos hace enfermar, ¿no?
Las hormonas del estrés apagan el sistema inmunitario, incluso la medicina usa este efecto en algunas ocasiones. Por ejemplo, si me trasplantaran un corazón, mi sistema inmunitario lo rechazaría. En esos casos, los médicos dan hormonas del estrés y eso impide que funcione el sistema inmunitario. Es tan claro que suprime el sistema inmunitario que lo usamos como un medicamento. Cuando la persona está bajo estrés, afecta de dos maneras: la primera es que deja de haber crecimiento y la segunda es que se apaga el sistema inmunitario. De esta forma, virus nocivos pueden atacarme fácilmente. Cuando estás bajo mucho estrés, te enfermas. Y debo decir que, si tomamos una muestra de sangre de cada persona, descubrimos que todos tenemos células cancerígenas. Las tenemos siempre, pero si está funcionando el sistema inmunitario, no pueden crecer. Una vez que se apaga el sistema  inmunitario, proliferan. Es como el catarro: no tienes que coger el virus, ya lo tienes dentro. Son organismos oportunistas. El 90 por ciento de la gente que va al médico es debido al estrés, y también el cáncer funciona igual.

Explíquenos qué es la medicina cuántica o medicina de la energía.
Como decía, la primera razón por la que la medicina de hoy es cuestionable es porque los médicos no saben cómo funcionan las células. La segunda es que la medicina está basada en la física de Newton. No reconoce la energía, esa parte invisible, las señales electromagnéticas. Pero, a principios del siglo XX, apareció la física cuántica, que dice que todo es energía, lo que podemos ver y también lo invisible. Si miras dentro del átomo, hay electrones, protones, neutrones. ¿Y qué hay dentro? Energía. La ciencia más reciente indica que el cuerpo responde a la física cuántica, no a la newtoniania. La medicina dice que quiere cambiar la química del organismo con drogas y la nueva medicina dice que hay que cambiar la energía. Y esta nueva medicina, la cuántica, es mucho más poderosa, porque responde primero el campo energético que el físico.

Si todo es energía, ¿los pensamientos también? ¿Cómo influyen en nuestra salud?
La mente es energía. Cuando piensas, transmites energía, y los pensamientos son más poderosos que la química. Así que esto es peor para las empresas farmacéuticas porque no lo pueden vender. Por tanto, no les interesa una conexión entre la mente y el cuerpo. Pero es cierto que las propias creencias se convierten en un campo energético, una transmisión, y esta se transforma en una señal que es capaz de cambiar el organismo. Y así es como funcionaba la sanación antes del desarrollo de la medicina. La gente sanaba con los chamanes, con las manos... pero eso no puede vender y por eso la medicina no quiere ir por ese camino. Y es la razón por la que yo cambié mi carrera. Estaba enseñando en la universidad que hay que seguir con drogas y sabía que eso no era verdad. La medicina lo conoce, pero no habla de ello. Sabe que el pensamiento positivo, el placebo, puede sanar, y también que el pensamiento negativo puede matar. Uno se llama placebo y el otro nocevo. En realidad, no es que sea positivo o negativo, es la manera de pensar. Si el médico te dice que tienes cáncer, aunque no tengas cáncer, si lo crees, crearás la química que generará cáncer. Por tanto, el problema no es tanto el entorno real sino el que tú interpretas.

 La mente es energía. Cuando piensas, transmites energía, y los pensamientos son más poderosos que la química

Y eso enlaza con la física cuántica.
Totalmente. Por eso no funciona la medicina, porque no reconoce la ciencia cuántica. No mira hacia ahí porque el dinero está en otro lado.

Usted ha explicado que, en la mente, quien realmente tiene el poder es el subconsciente, ¿por eso es tan difícil cambiar hábitos de pensamiento?
Es millones de veces más poderoso y más importante que la mente consciente. Utilizamos el subconsciente el 95 por ciento del tiempo.

Pero no lo podemos controlar.
Lo puedes reprogramar. La información del subconsciente se recibe en los primeros seis años de vida. Eso que aprendiste en esos años se convierte en el conocimiento fundamental de tu vida. Por tanto, hay muchos estudios que demuestran que las enfermedades que tenemos de adultos, como el cáncer, tienen que ver con la programación y el entorno que vivimos en los primeros seis años de vida.

Los comportamientos que vienen del subconsciente no los percibes y pueden estar haciéndote daño

Es decir, los niños absorben también sus enfermedades o sus actitudes negativas, y así se 'programa' su subconsciente. ¡Qué gran responsabilidad para los padres!
La gente, cuando oye esto, se preocupa, se culpa. Pero no eres culpable si tú no sabes que el subconsciente funciona así. No lo sabían nuestros padres, ni nuestros abuelos ni bisabuelos. Ahora bien, cuando lo entiendes, tienes que cambiar tu manera de vivir, porque entonces sí eres responsable. Está demostrado que si un niño adoptado vive en su familia casos de cáncer, en su madurez puede padecer cáncer aunque su genética sea diferente. Sería algo así como conducir un coche: si te enseñaron a conducir mal y has automatizado esa forma de conducir, pues lo más probable es que tengas accidentes. Si te enseñaron a maltratar tu cuerpo con mala información, destruirás el vehículo de tu cuerpo, cuyo conductor es la mente. El futuro es una mejor educación para los niños, incluso en la etapa prenatal. 


 ¿Podemos reprogramar el subconsciente para estar más sanos o ser más felices con nuestra vida?
Los comportamientos que vienen del subconsciente no los percibes y pueden estar haciéndote daño. Quizás te sientes enfermo y echas la culpa a otra cosa. Al cambiar estos programas erróneos en el subconsciente, puedes recrear toda tu vida. Hay varias maneras de hacerlo. Se piensa que, cuando la mente consciente registra algo, la subconsciente también filtra esa informacion, pero no es así. La mente consciente es creativa y la subconsciente trata de todos los hábitos. Si le enseñas al subconsciente algo diferente, se lo enseñas también a la consciente, pero no al revés. Por ello, la manera de reprogramar es repetir y repetir hasta que se crea un hábito. Si leo un libro de autoayuda, mi mente consciente dice: “Sé todo lo que hay en el libro y lo aplico”, pero la subconsciente no se entera de nada. Entonces, piensas: “¿Por que sé tanto y todavía mi cuerpo no funciona?”. Los pensamientos positivos, el conocimiento... solo funcionan el 5% del tiempo, pero el 95% son los hábitos que tengo desde mi niñez. Y esa es la razón por la que los pensamientos positivos no son suficientes. Ayudan, pero no ves muchos resultados. Todo sigue igual hasta que no cambias el subconsciente. Técnicas de psicología basadas en la energía como la hipnosis o el Psych-K son una manera de cambiar el subconsciente, es como un aprendizaje rápido.

Con su investigación, ha aunado ciencia y creencia, un binomio que evita la mayoría de los científicos. ¿Usted cree en la eternidad?
Absolutamente, sí. No hay dos personas iguales, y lo digo desde el punto vista biológico. Si cojo mis celulas y las tralado a tu cuerpo, no soy yo, el sistema inmunitario las rechaza. En las células hay como una especie de antenas en miniatura. Son receptores y algunos son autorreceptores. Tú tienes diferentes autorreceptores a los míos. Pero los receptores reciben las señales del entorno. Si corto esos receptores, la célula no tiene ninguna identidad, porque no le viene de dentro sino de fuera. Para explicarlo de forma gráfica, diría que el cuerpo es como un televisor: mis antenas captan y reproducen el programa televisivo de Bruce. Esos receptores recogen esa transmisión. Si estoy viendo la tele y se estropea el tubo de la imagen, ha muerto el televisor, pero sigue la transmisión. Así que cojo otra, la enciendo, conecto el canal y vuelvo a ver el programa de Bruce, pero en otra tele, o lo que es lo mismo, en otro ser. Si ese ser tiene los mismos receptores que tienes tú, volverás a estar trasmitiendo lo mismo, pero en otro cuerpo. Esto explica la reencarnación y quiere decir que el cuerpo puede ir y venir, pero la transmisión siempre está ahí.

¿Eso le hizo creer que tenemos espíritu?
Nunca había creído en el espíritu, pero cuando comprobé esto en la célula, me cambió la vida entera. La pregunta que me planteé es: ¿por qué esa duplicidad?, ¿por qué tener un espíritu y un cuerpo? Y la respuesta vino de mis células: si solo existiera el espíritu, ¿a qué sabe el chocolate?  Solo con la parte espiritual, ¿cómo vivir una puesta de sol? ¿Qué se siente cuando se está enamorado? Todas esas sensaciones vienen de las células del cuerpo, que puede oler, sentir, tener experiencias. Recoge todo eso, lo transmite al cerebro. Se convierte en vibraciones y lo transmite a la fuente del ser. Si se muere mi cuerpo, mi fuente de ser y mi espíritu tienen la memoria hasta que tenga otro cuerpo. La lección más importante es que estar vivo es un regalo, una alegría por todo lo que podemos sentir. Cuando hagamos eso, todo el mundo estará sano.

Fonte: http://elcorreodelsol.com/articulo/los-pensamientos-curan-mas-que-los-medicamentos


~o§.§o~

 Através das suas previsões astrológicas e seu mapa numerológico, você acompanha a dinâmica planetária que descreve o seu cotidiano e a frequência vibracional do seu dia pessoal - e assim  poderá exercer o seu livre-arbítrio com muito mais consciência! A análise dos trânsitos, progressões, lunações e eclipses sobre o mapa natal permite uma antecipação das crises, que podem então ser aliviadas com um tratamento de apoio e prevenção.
Entre em contato e encomende agora suas previsões!

 
Rômulo Grandi


26 de fev. de 2011

Sentimentos versus Emoções

Uma ótima reflexão sobre o tema, que transcrevo aqui.
  
"...many people will not admit the connection between their disease and their blocked energy caused by unacknowledged, stuck emotions."


Feelings vs Emotions

Ivan Rados


by: Ivan Rados

We want to know the Universe and we send expeditions into space. However, the answer is right here, in each of us. To be able to reach it, we need to wake up, to integrate all the disowned and fragmented pieces of One Self. We need to begin to cultivate awareness of our consciousness. The majority of people go through their days in a semi-alive state, detached from their feelings, shut off, numb, deadened, incomplete. Our feelings are our guides, they tell us when something needs attention and we need to be able to listen to them. Feelings are different from emotions.

Emotions rest below the level of ordinary thinking. People can be angry without realizing it. Even when they realize their anger, they may or may not acknowledge it.

Thoughts are linked with your emotions; your emotions are linked with your body. Emotions can change the entire chemistry of your physical self. Fear can make your heart race. Stress can cause skin rashes. Anxiety can cause migraines. The list goes on and on.

The endocrine system is comprised of glands producing various hormonal secretions with the specific functions that go directly into the bloodstream and lymphatic system.  The hormones are then circulated to every part of the body.  “Hormone” is taken from the Greek word for “excite,” and means “to set in motion, excite, stimulate”. Excitement is linking endocrine hormones to our emotions. Excitement comes out of pleasure.

The mind looks constantly for pleasures. The excitement you like you call pleasure; and the excitement you don’t like, you call pain, disease, suffering and illness. Both are excitements and both are pleasures. Both positive and negative pleasures go on changing into each other. Both are not real; beyond is real.

Feelings are more subtle than emotions. Feelings are authentic. They develop with your consciousness, the moment your soul enters into the body. Emotions develop later, as the mind begins to cover your consciousness, as a cloud covers the sky. Without awareness of your consciousness, your feelings become lost within your being.

Feeling love is not the same as the emotion of love. Feeling joy is not the same as the emotion of joy. Feelings are eternal, as your consciousness is eternal. Feelings can never be destroyed. They are sleeping, just beyond the shadow of your ego-mind. Emotions compensate for these hidden feelings. However, emotions are not feelings; just as thoughts are not you.

All authentic feelings – unconditional love, utter bliss, unlimited freedom, absolute joy, immense compassion – are part of one feeling; the feeling of being alive. To have the feeling of being alive is what Love IS (Love means total acceptance of all that is in your reality). That aliveness is the small light inside of you, if unconditionally accepted by your consciousness, it will explode into the brightness of a thousand suns. That is unconditional love shining through unconditional compassion. That is what bliss or enlightenment is.

Most people are so afraid of emotions that they continually invest an enormous amount of energy to keep feelings at bay, out of their awareness; therefore, the emotions remain stuck in their bodies and their unconsciousness, driving and controlling from there, causing discomfort on all levels. The blocked energy used to keep emotions “away” will eventually cause physical sickness.  Usually, this is the point when a person will realize that something is wrong and even then, many people will not admit the connection between their disease and their blocked energy caused by unacknowledged, stuck emotions. Paradoxically, only when we allow ourselves to experience emotions in their full intensity, do the emotions actually go away, and in their place feelings start to emerge.

Only when we stop guarding against our emotions, when we drop our usual defenses and allow ourselves to be fully present to any emotion, only then will the emotion dissolve and disappear. So, there is no way around; the only way to the other side is through the experience. The more we do this, the more the toxic, intense emotions that have a tendency to control us will dissolve and the more space and energy will be freed up for the higher feeling of deep compassion to One Self and the Existence. When we allow the emotions to emerge fully and we move through them with responsibility and ownership, a true desire to experience, understand and move on, then we can break the genetic code that keeps us an easy target for manipulations.

Why are people so often so afraid of their own emotions?

Our primary, low order emotions can be very intense and their purpose is to inform us about our inner states and our environment. We are all born with the capacity to experience the full spectrum of human emotions. In the optimal early social environment, children gradually learn to accept their emotions and to deal with them – to self-soothe, contain, ground, to stay present when experiencing an intense emotion, to learn from it, and to move on. Children master this through the acceptance of their emotions by the primary caregivers. The adults in charge will tolerate the children’s strong emotions, will stay fully present, will not crumble, retaliate, reject or withdraw.  With a stable presence, the caregivers will provide the containment, soothing and eventually the understanding children need.

Children will internalize these interactions and they will become the matrix for their own management of later emotions.  So, what happens when the adults are disconnected from their own emotions, and consequently horrified by their own emotional reactions to children’s feelings and emotional needs? They withdraw, perhaps punish or shame, and induce a sense of guilt in the simple, developing, pliable minds of children. Children quickly learn that feelings are too dangerous; they confuse feelings with emotions, and adopt the defenses against them that have been modeled by caregivers.

From the shadow of one inadequate parent, the next generation of poor careers emerges, so the chain continues. Well, you can break the chain of denial, deadness, unconsciousness, disconnection. Start now. You can only start feeling safe if you allow yourself to feel afraid; you can only find forgiveness if you allow anger to emerge; you can only become truly strong if you let yourself be vulnerable. To feel love you must allow yourself to hate and to experience happiness, you have to pass through the sadness of loss. To find self acceptance you must first find your anger, as deep shame is anger turned inside.

Shame is a sense of the wrongness of the core self, the most painful emotion of all. It’s a result of original legitimate anger in response to the humiliations and non-acceptance of One Self being turned against self in an unsafe environment. If you feel angry too easily in the present, you can be sure that it’s not an authentic feeling. It’s a defense, usually against ‘softer’ feelings of vulnerability, disappointment and sadness. The same applies to all other feelings. Our feelings exist in layers. For example, if vulnerability felt unsafe for you as a child, you might have become emotionally angry, hiding behind your anger your true feelings of being hurt. Or if emotional anger was not allowed, you might be hiding it behind your helplessness, and so on.

 Our emotions are our guide to the areas of our lives that need to be addressed and changed. We need to embrace them, learn from them, go through them, and eventually let go of them, replacing them with true feelings. Letting go happens naturally once we have allowed ourselves to feel and process the emotions. Letting go is important, for, as essential as they are for our personal growth, emotions at the same time disconnect us from the state of Oneness.

Emotions are mainly based in the unconscious, which keeps us disconnected from the Infinite Universe within ourselves. Feelings are based in consciousness. This is why it is essential to accept our emotions and move through them consciously.   For consciousness is our connection with the Oneness, with the Divine Creation, which is a pure state of love (compassion), joy and bliss.

Unresolved emotional issues or emotional traumas, which are not processed, acknowledged or allowed to be experienced, can obstruct the free, healthy flow of energy in the body-mind-soul system. That energy is not flowing freely and pain is created in a particular weak part of the body, the organs, joints, bones or muscle. Those areas of stagnant energy contain a negative emotional charge that literally fragments the human energy field into separate compartments without any or with very little communication between them.

The body is not only feeling the real pain, but you are adding more layers of negative traumatic energies with daily attitudes, self-condemnation, anger, guilt, or fear making the situation even more complex and more traumatic. Expressions of resistance, fear, anger, guilt, shame, envy, resentment, and all other forms of negativity are distorted energy of your One Self.

When we go through a negative experience, usually we form a belief, such as; “I’m not worthy,” or “I am not able to make it” or “I’m stupid” or “I am in pain.” Infinite negativities. If we believe in those statements, we are allowing imprints in our energy field and they start having a separate life from the rest of our being.  It is dissension or conflict that has never been resolved in our system; friction that was never observed or allowed and transformed, but rather stored and put on hold.

The only place that it can be stored in is our own being.  Every single cell of our body holds the unprocessed painful emotions, and the more effort we make to keep it at distance from our awareness, the more it controls us. It keeps triggering intense emotional reactions of being flooded, in between being numb and unable to feel fully alive; it keeps reinforcing non-thriving, untruthful negative believes about us and life; it motivates destructive maladaptive behaviors.

For example,

when you feel pain and want to get rid of it, or forget it, or “kill it” with “painkillers”, you just have to remember one thing:

The common perception of pain is one of the `problem`. The mind becomes preoccupied with thoughts and ideas to avoid or forget or run away from the problem.  You will not extinguish fire with petrol; sometimes even water can not do it.  You need knowingness, and understanding of the fire.  Real knowingness is that the fire is not the problem, but ignorance of the fire is. With knowingness you change your perception of the ‘problem’ into a ‘situation’.

When you change the ‘problem’ into a ‘situation,’ a whole new paradigm will happen. With the ‘situation’ your mind starts shifting, opening and yielding to the consciousness. With the situation there is a chance, an opportunity, a moment to consider… and in that state it is easy to see the pain as something that can unite or integrate us rather than separate us; something you can experience, you can resolve. The pain becomes not your enemy, but your friend, showing you the neglected part of yourself. That part needs your attention, love, and care.

When you stop defending against pain by stifling your own growth and choosing a lesser pain, you will become more connected to One Self. When you numb your pain and remove it from your awareness, you become disconnected from parts of One Self. Your energy and psyche become compartmentalized. In contrast, when you connect with the energy of pain, you are connected with One Self. Nothing exists that is not connected with something else.

In relating to One Self you are also relating to the outside of One Self through a creation of choices. Everything you do is by choice, often unconscious. We are naturally striving towards joy, pleasure, happiness, love… Every single moment, on the basis of your definition of yourself and your belief system, you are determined to choose what feels the best choice at the particular moment, even if that choice is pain. Something in you, your definition, and your belief system is telling you that to continue having pain is the best choice available at the particular moment. That chosen pain seems less painful than the actual general change of your health.

Change is scary, change can be very painful. You are assigning pleasure and pain all the time: This choice is more pleasurable than this one, or this choice is less painful than that one.  In our psyche, pleasure and pain are perceived relatively. If the situation instantly changes, offering the choice of less pain, we will instantly choose and change. Every living organism functions on this basic principle: seek pleasure and avoid pain. This is unconscious, it’s survival. However, we human beings can and need to evolve beyond this basic animal principle.

We can learn from pain, we can learn from emotions and let it guide us in becoming healthier and whole. Just embrace the pain, embrace every emotion and in doing so, you will embrace all the disowned and abandoned parts of One Self. You will become more integrated, more wholly.

RePrinted from an article by: Ivan Rados
http://ivanrados.com/

~o§.§o~

Consultoria Astrológica e Numerológica
Mapa Natal, Retorno Solar, Trânsitos, Progressões, Sinastrias
Mapas infantis (de orientação educacional) e Orientação Vocacional


 Encomendando os seus trânsitos astrológicos pessoais e seu mapa numerológico, você acompanha a dinâmica planetária que descreve o seu cotidiano e a frequência vibracional do seu dia pessoal - e assim você poderá exercer o seu livre-arbítrio com muito mais consciência! A análise dos trânsitos, progressões, lunações e eclipses sobre o mapa natal permite uma antecipação das crises, que podem então ser aliviadas com um tratamento de apoio e prevenção.


Rômulo Grandi
Mestre em Reiki
Consultor em Astrologia e Terapias Holísticas

17 de fev. de 2011

Na onda da hipertensão


 

Teste de Reconhecimento de Amplitude da Energia do Coração

Dr. Paul Pearsall, Ph.D. - Presidente & Executivo-Chefe
Ho'ala Hou (To Reawaken), Inc. 

AVALIAÇÃO

[0] = Nunca
[1] = Quase nunca
[2] = De vez em quando
[3] = Bastante
[4] = Quase sempre
1. Você está com pressa? (Olhou as outras perguntas deste teste?)
2. Você é tão ocupado que os outros têm medo de "incomodá-lo"?
3. Os outros diriam que você anda, dirige ou move-se rapidamente?
4. Você gosta de "economizar tempo" fazendo muitas coisas simultaneamente e/ou pensando em uma coisa enquanto faz outra?
5. Parece-lhe que você sempre entra na fila que anda mais devagar?
6. "Usuários ineptos da pista expressa" (motoristas lentos) incomodam você?
7. Você come depressa?
8. Você pressiona botões de elevadores quando já estão acesos?
9. Você fala depressa, segundo evidenciam uma respiração ofegante ou o ato de ficar sem fala?
10. Você tenta apressar a fala de seu interlocutor dizendo "sei, sei" ou coisa parecida?
11. Você "telegrafa seu desagrado" (estala a língua, inclina a cabeça, levanta o canto esquerdo da boca, suspira, coloca a mão no quadril, revira os olhos)?
12. Você perde a calma quando dirige?
13. Você é cético e desconfiado com relação aos motivos dos outros?
14. Você dorme mal (insônia, ronco, ranger de dentes, sono agitado)?
15. Você revive acontecimentos desagradáveis, ensaia respostas sarcásticas, espalha boatos e/ou ameaça deixar o emprego ou terminar uma relação?
16. Você tem conflitos familiares ou conjugais e/ou negligencia a família?
17. Sente um "desapontamento" depois de atingir um objetivo ou obter grande êxito? 
18. Sente que não teve ou não tem amor incondicional suficiente de seu pai ou sua mãe?
19. O timbre de sua voz ou riso é áspero, crítico, sarcástico? Você usa palavrões?
20. Você cerra os punhos, dá de ombros ou faz movimentos bruscos de cima para baixo com a mão enquanto fala?
21. Você evita chorar em público e/ou seu riso é mais ruidoso, explosivo, semijocoso do que sincero?
22. Você reage a críticas de maneira emocional, defensiva ou negativa?
23. Sente-se sonolento e/ou adormece quando fica sentado em silêncio durante algum tempo ou fica magnetizado em reuniões "enfadonhas"?
24. Responde a perguntas antes que elas sejam completamente formuladas, enfrenta argumentações antes de serem apresentadas na íntegra e tem certeza de que está com a razão?
25. Viver e/ou trabalhar com você seria um relacionamento tenso e estressante?

TOTAL DE PONTOS = _______

(Adicionar uma penalidade de cinco pontos se houver tentativa de fazer poucos pontos)

COMO INTERPRETAR O RESULTADO DO SEU TESTE DE RECONHECIMENTO DE AMPLITUDE DE ENERGIA DO CORAÇÃO

0-5 = ENERGIA EQUILIBRADA (a energia do seu coração está em equilíbrio saudável).
6-10 = ENERGIA BASTANTE AGITADA (você está aborrecendo seu corpo e o corpo e o coração dos outros).
11-20 = ENERGIA EXTREMAMENTE AGITADA (você está se tornando um chato para o seu corpo e para o corpo e o coração dos outros).
21 E ACIMA = ENERGIA TÓXICA (você se tornou um chato para o seu corpo e para o corpo e o coração dos outros).

COMO ENTENDER A CONTAGEM DE PONTOS DE SEU TESTE T*R*A*E*C*

Os 1.000 pacientes cardíacos que constituíram a amostra de candidatos submetidos ao T*R*A*E*C* obtiveram em média um total de 66 pontos. Comparativamente, uma amostra de 200 polinésios a quem dei esse teste durante um circuito da palestras realizado pelas ilhas do Pacífico fizeram a média de 8 pontos totais. Quando anuncio os resultados de meu teste em encontros, alguém sempre argumenta que o sistema de avaliação não é realista. Alguém disse: "Seria impossível alguém fazer menos de 21 pontos em seu teste. Essa pessoa não seria normal e não nos esqueçamos de que os polinésios não dirigem nem têm elevadores - não vivem no mundo moderno com todo seu estresse". Minha resposta é invariável: "Mas essa é exatamente a questão". Em nosso cotidiano aquilo que passamos a aceitar como energia vital "normal" evidencia os permanentes maus-tratos a que o cérebro submete seu corpo e coração. A normalidade constitui agora o principal risco à nossa saúde.

Embora minhas técnicas de amostragem e de aplicação seletiva do T*R*A*E*C*, como instrumento clínico de ensino, descartem interpretar esses números de qualquer outra maneira que não como uma indicação e um quadro geral da energia do coração, o grau de diferença entre a média do grupo ocidental e a do grupo polinésio é interessante em termos da ecologia da energia da vida insular em contraposição à do continente. Vivendo no Havaí, cheguei à conclusão de que o modo de viver dos povos da Oceania e sua estreita união com a energia da natureza, sua confiança em antigos modelos de energia curativa, o alto grau de importância conferido à família e à concepção de que o coração (e não o cérebro) é o centro de um estado de consciência muito sereno, podem explicar a contagem de pontos mais baixa dos polinésios.

Cada um dos quesitos do T*R*A*E*C* fundamenta-se nas últimas pesquisas da psicologia do coração. Pesquisas realizadas nas áreas de psiconeuroimunologia (o estudo de como o cérebro e o sistema imunológico interagem com o mundo), psicologia social (o estudo de como as relações interpessoais influenciam o mundo e são influenciadas por ele), psicologia da saúde (o estudo de como nosso modo de pensar e nos comportar afeta nossa saúde e a dos outros) e epidemiologia (o estudo das origens e padrões das doenças), demonstram claramente que menor grau de hostilidade e ceticismo, bem como vínculos mais estreitos na forma de sistemas sociais menos rígidos que se apóiem mutuamente, constituem um importante atenuante do desenvolvimento de doenças cardíacas. A exigüidade de espaço não permite uma discussão mais extensa dos fundamentos da pesquisa considerados para cada item do teste, mas nenhum item foi incluído sem que sua relevância fosse apoiada por cinco revelações, pelo menos, de pesquisas atuais realizadas nas áreas citadas. Todas essas áreas estão indicando que reações emocionais crônicas a estímulos estressantes secundários e inesperados, hostilidade sem causa aparente, bem como a impaciência, parecem ser os principais indicadores de energia do coração desordenada ou desequilibrada e tóxica.

CINCO FALÁCIAS DO CÉREBRO

Em minhas entrevistas com pacientes que fizeram o teste T*R*A*E*C*, descobri cinco "falácias do cérebro" que elevaram os resultados deles e retrataram a natureza egoísta, dominadora e reativa de um cérebro independente da moderação do coração. Quanto mais elevado o resultado obtido no T*R*A*E*C*, tanto mais permanece intacto o pacto destruidor cérebro/corpo e tanto menos energia do coração resta para arrefecer um cérebro exaltado, empenhado em maltratar o próprio corpo.

Falácia número um: o mundo exterior trabalha contra nós. Os pacientes que fizeram maior número de pontos no T*R*A*E*C* (acima de 21) demonstraram ter aquilo que o psicólogo Albert Bandura chama de "crença no determinismo ambiental absoluto". O cérebro vê o mundo como um problema com o qual tem de lidar, e os pacientes que fizeram maior número de pontos foram levados pelo cérebro a acreditar que todo comportamento humano é uma função de estímulos ambientais e que somos vítimas de um mundo cruel, e muitas vezes injusto. O cérebro está sempre pronto a travar combate com esse mundo e proteger a maior parte possível de seu território durante o maior tempo que lhe for possível.
O cérebro tem uma resposta pronta para aquilo que Albert Einstein julgava ser a mais importante das questões: “O universo é um lugar amigável ou hostil?” O cérebro tem certeza de que o universo é hostil e de que, para sobreviver, é preciso lutar contra ele. Essa orientação determinista faz com que o cérebro não cesse de nos dizer que precisamos estar sempre preparados para fazermos o máximo na luta contra as desvantagens cósmicas colocadas em nosso caminho. Imaginemos um paradoxo mental supremo, onde o cérebro muitas vezes maltrata e aproveita-se do coração a tal ponto que mata a si próprio na tentativa de salvar a vida. Numa forma de pacto suicida cérebro-coronariano, no qual o coração é um mero espectador, o cérebro torna-se seu próprio carrasco.
O psicólogo B. F. Skinner sintetizou este conceito do determinismo ambiental e ausência de conexão e participação energética no mundo quando escreveu: "Uma pessoa não produz mudança no mundo, o mundo produz mudança na pessoa". A ilação deduzida pelo cérebro é que uma pessoa só pode controlar sua vida esforçando-se de maneira completa, constante e sempre alerta para regular o mundo exterior tanto quanto possível. O resultado é um coração sempre agitado, sobrecarregado por um cérebro exigente, faminto de nutrientes que lhe capacitem a compulsão pelo trabalho, que usa como mecanismo defensivo.
A propensão do coração é muito menos determinada pelo ambiente que a do cérebro e considera o universo como um lugar essencialmente amigável. O coração fala na língua sintetizada pela escritora Elizabeth Rivers: "Quando uma coisa não me é favorável, abandono a idéia de como essa coisa deveria ser, pois acredito que minha mente [o cérebro] não conhece todos os detalhes da situação".

Falácia número dois: culpabilidade. O cérebro tem tendência crônica para transferir a responsabilidade. Visto que se considera ser "nós" e o mais inteligente de nossos órgãos, ele rapidamente grita "falta" quando as coisas parecem não lhe favorecer. Quando a esperada promoção no emprego, ou crédito por um trabalho ou recompensa por um ato de ternura, ou espaço conveniente para estacionar, ou quando a aquiescência plena de expectativas e necessidade de controle demonstrada por outras pessoas não parecem materializar-se imediata e rapidamente, o cérebro ressente-se de injustiça. Suas respostas imediatas são: "É injusto, por que você em vez de mim, como você pôde fazer isso?”
O coração considera-se parte de uma Mente tripartida, composta de cérebro, corpo e coração e está pronto a unir-se ao poder racional do cérebro e aos extraordinários sentidos do corpo para dar sua contribuição de efeito calmante ao nosso viver diário. Enquanto o cérebro usa sua luminosidade racional para buscar razões, a sabedoria do coração ensina que a Mente tripartida, da qual ele é parte, jamais pode impor "sua" vontade, mas apenas prosseguir no Caminho.


Falácia número três: trabalhar com afinco é sempre compensador. Ainda que veja o universo como um lugar severo e hostil, com o qual tem de lutar a fim de manter uma certa aparência de domínio para não ser vítima dele, o cérebro está convencido de que pode abiscoitar sua parte, se trabalhar mais e melhor que os outros cérebros. Acredita que, com esforço adequado, manipulação habilidosa para levar vantagem sobre os outros, e com sacrifício dos aspectos da vida pelos quais o coração tanto anseia, pode manter-se vivo. Muitos livros de auto-ajuda são escritos no código do cérebro. Contêm instruções para levar o leitor a tudo que ele poderá ser, evitam os erros de disfuncionalidade e mostram ao leitor tudo que poderá fazer, e como vencer - não importa que cada vitória exija o prejuízo de outra pessoa.
Um livro de auto-ajuda escrito no código do coração seria mais como algo do tipo "ajuda para nós" e conteria quatro advertências essenciais à saúde: não abuse de seu coração permitindo que o cérebro prejudique-o fisicamente, submetendo-o a constantes estresses e tensões em busca de realização pessoal; não tire proveito de seu coração, permitindo que o cérebro se aproprie indevidamente de sua energia miraculosa para objetivos egoístas; não destitua o coração de suas funções, permitindo que o egoísmo inato do cérebro afaste você do coração dos outros; finalmente, não descuide do coração, permitindo que o cérebro fique tão desgastado no esforço de permanecer vivo, a ponto de esquecer-se de dedicar tempo ao coração para que este reflita com antevisão nos objetivos que você escolheu para sua vida.
Muitos dos popularmente denominados livros de auto-ajuda oferecem estratégias individuais para fugir à rejeição, para libertar e exprimir o eu e alcançar um estado de recuperação vitalício. Livros escritos no código do coração, do tipo "ajuda para nós", mais provavelmente ensinariam que você sempre deveria tentar ser, no mínimo, um pouco menos do que poderá ser, tentar colaborar mais e competir menos, e dar mais atenção às memórias celulares afetuosas armazenadas dentro de você, na forma de uma pessoa interior mais velha e experiente. Mais atenção do que aquela que você dá para satisfazer o cérebro muitas vezes socialmente imaturo e narcisista, essa lamuriosa "criança interior". Livros deste tipo, com maior propriedade, salientariam o fato de que, independentemente da atitude positiva do indivíduo, do afinco com que o cérebro o faz trabalhar, há certas coisas que ele jamais vai alcançar. Além disso, a maioria das coisas que desejamos alcançar exige que tenhamos ligações estreitas e mutuamente dependentes com outras pessoas. Livros escritos neste código provavelmente pedirão ao leitor que medite sobre novas maneiras de compreender suas responsabilidades, limitações e impactos emocionais que possam causar nos outros, em vez de oferecer uma nova técnica de auto-realização. Seriam provavelmente obras escritas segundo a descrição de um livro feita por Franz Kafka, "um machado para o mar congelado que existe em nosso interior", ao passo que livros escritos com o código do cérebro mais provavelmente nos ensinarão a patinar sobre o gelo espiritual.
O coração sabe que o sucesso não pode ser perseguido, que ele deve seguir-se como resultado de uma orientação para o mundo que seja mais dócil, equilibrada, solícita e amorosa. O coração sabe que existem muitos fatores ambientais intransigentes que estão além de qualquer controle. Sabe que alguns obstáculos à nossa vida são ali colocados porque não podem ser transpostos e porque podem nos ensinar a deixar de fazer tentativas e começarmos a ser.

Falácia número quatro: eu posso mudar as pessoas. O cérebro tende a considerar-se um controlador muito hábil e poderoso de outros cérebros, e se julga também muito "auto-eficiente". Julga-se suficientemente astuto para efetuar mudanças nas pessoas, para fazê-las seguir os caminhos que ele deseja. Como isso nem sempre acontece, ou quando o cardiotemperamento das pessoas se manifesta, ainda que alguns comportamentos tenham sido alterados, o cérebro se irrita, fica impaciente e até mesmo incita o corpo à prática de atos agressivos. O coração é suficientemente sábio para compreender que o cérebro não pode modificar outros cérebros, mas sabe também que, se o cérebro souber ouvir, será capaz de aprender a pensar sobre os outros de uma maneira mais tolerante, mansa e receptiva. O coração sabe que "na verdade, não se mudam as pessoas, mas pode-se mudar a maneira de pensar sobre elas".
O coração tende a pensar mais de uma maneira consoante com o que os psicólogos sociais denominam "determinismo recíproco". O psicólogo Albert Bandura escreve que as pessoas possuem aptidões auto-orientadoras que as capacita a exercer algum domínio sobre seus pensamentos, sentimentos e ações através da consciência que geram. Essa consciência tanto pode ser uma opinião da vida induzida pelo cérebro, quanto um coro da Mente, produzido pelo cérebro, coração e corpo, que estabelece uma ligação tranqüila com a vida. É difícil modificar a atuação de um cérebro, mas quando nos tornamos mais conscientes de nosso coração, modificamos nossa Mente ao introduzirmos energia "V", de maior equilíbrio, no pacto cérebro/corpo.

Falácia número cinco: frustração significa agressão. Para o coração impaciente, a frustração de seus objetivos rapidamente conduz à ira. Os psicólogos chamam a isto de hipótese "frustração-agressão". Segundo demonstram pesquisas atuais, entretanto, não se trata simplesmente de que pensamentos de frustração levem diretamente a atos agressivos, senão que a frustração provoca sentimentos de ira, de hostilidade e de contestações ao autodomínio (leia-se domínio exercido "pelo cérebro"). Essas emoções desagradáveis, por sua vez, levam à agressão dirigida a quem quer ou o que quer que esteja próximo. Assim, a frustração do cérebro transforma-se em ira que induz à beligerância. O cérebro pode ter experimentado frustração no trabalho e ter-se irritado mais tarde, em casa, provocando ruptura na ordem familiar. Tudo provocado pela frustração deslocada do cérebro.

TER CORAÇÃO

Imaginemos que a cada dia, dois aviões Jumbo 747 lotados sofressem acidentes em que não houvesse sobreviventes. Teríamos aí o número de pessoas vitimadas diariamente por doenças cardíacas nos Estados Unidos. Muito se fala sobre os principais fatores de risco, tais como colesterol elevado, obesidade, fumo e pressão arterial alta que levam às cardiopatias. Todavia, cerca de metade dos indivíduos que sofrem seu primeiro ataque cardíaco não tem quaisquer desses fatores de risco comuns; mais de oito em cada dez pessoas que têm três desses fatores de risco nunca sofreram um ataque; a maior parte dos indivíduos que sofrem ataque cardíaco não apresenta a maioria dos fatores de risco. Parece haver algo mais atuando e que é responsável pelas cardiopatias, talvez o fato de que o cérebro parece estar constantemente maltratando o coração.
Servindo-nos dos resultados do T*R*A*E*C*, poderemos começar a reconhecer a natureza da energia do coração e ajudar o cérebro a aprender a perceber sua aflição e dor. A pesquisa mostra que o número de anos de instrução de uma pessoa é fator mais importante para estabelecer os riscos das doenças cardíacas do que todos os outros fatores de risco juntos. Embora seja mais provável que pessoas instruídas leiam e compreendam advertências sobre saúde escritas, elas também tendem a se conscientizar mais do que acontece à sua volta e de como a ação das forças sociais influi em suas vidas. Neste capítulo, estou propondo um tipo de instrução que inclui: aprender a ler os avisos sutis da energia emanada do coração; entender que o coração se sente prejudicado quando é excluído do diálogo cérebro/corpo ou quando o cérebro exigente o submete a uma tensão que está além de seus limites. Se aprendermos a utilizar o código do coração poderemos ser capazes de prolongar não apenas nossa vida, mas a vida daqueles a quem amamos. A mais importante das advertências relativas à saúde talvez seja "ter coração".
 ---------------
Extraído de:
Memória das Células – A Sabedoria e o Poder da Energia do Coração”, de Paul Pearsall, Ph.D., Ed. Mercuryo, 1999, págs. 60-61.
“Uma síntese fascinante de sabedoria antiga, medicina moderna, pesquisa científica e experiências pessoais provando que é o coração humano, não o cérebro, que retém os segredos que conectam o corpo, a mente e o espírito.”

~o§.§o~

Consultoria Astrológica e Numerológica
Mapa Natal, Retorno Solar, Trânsitos, Progressões, Sinastrias
Mapas infantis (de orientação educacional) e Orientação Vocacional


 Encomendando os seus trânsitos astrológicos pessoais e seu mapa numerológico, você acompanha a dinâmica planetária que descreve o seu cotidiano e a frequência vibracional do seu dia pessoal - e assim você poderá exercer o seu livre-arbítrio com muito mais consciência! A análise dos trânsitos, progressões, lunações e eclipses sobre o mapa natal permite uma antecipação das crises, que podem então ser aliviadas com um tratamento de apoio e prevenção.


Rômulo Grandi
Mestre em Reiki
Consultor em Astrologia e Terapias Holísticas